Un día pasó para evidenciar que la Arquidiócesis de Puebla tiene algún en común con el gobierno del estado que preside, Rafael Moreno Valle Rosas, no mantiene el dialogo ante los conflictos sociales.
Fieles católicos del municipio de San Pedro Cholula, realizaron una protesta frente a la Curia Diocesana –donde se ubican las oficinas de administración religiosa- para exigir al arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, mantener como párroco de la región a Rafael Amador Tapia Zúñiga.
“Si el arzobispo, pregona que habrá diálogo en conflictos sociales, dice que se debe de atender cualquier problema, pero no los aplica, fuimos a buscarlos y nos atendió un vicario de apellido Corona. También promueve el amor al prójimo, pero no nos está amando, está cometiendo injusticias”, reprochó Dolores Roldán, del Consejo Económico de la capilla de San Pedro Apostol Cholula.
Rafael Amador Tapia Zúñiga, será trasladado al municipio de Acatzingo el próximo miércoles por indicaciones de la Arquidiócesis de Puebla. Se desempeñaba como titular de la capilla de San Pedro Apostol Cholula y tenía 7 barrios de 3 pueblos a su cargo.
Las últimas semanas, fue vinculado por mantener negociaciones con el presidente municipal, José Juan Espinosa Torres para convencer a la población de entregar los predios aledaños a La Gran Pirámide para la construcción del Parque de las Siete Culturas, obra conjunta con el ayuntamiento de San Andrés Cholula y el gobierno estatal.
“Vamos hacer oraciones”, “¡Tenemos que hacer una misa de acción de gracias para que se le ablande el corazón a Víctor!”, expresaban entre sí los inconformes que portaban carteles con las consignas: ¡Sr. Arzobispo pedimos Justicia!, y ¡Nos reprime el gobierno, nos reprime el Clero!
Las reuniones privadas del Tapia con el José Juan Espinosa- de quien este día recibió la Cédula Real por ser “un cholulteca distinguido”– no tienen fundamentos, refirió, María Rosa Covarrubias, al señalar que quienes están en contra de las políticas del sacerdote son personas que quieren pertenecer a una asociación religiosa con fines de “lucrar”.
“Lo voy a decir, son sólo 5 personas, que no se si tengan representación en el pueblo, pero están encabezados por Margarita Tlapa quieren dinero, ser reconocidas para pedir recursos a la iglesia, se inventan una organización cómo ‘Pro-Cholula».
El grupo de personas dijo que no permitirá que el sacerdote con 32 años de servicio en la zona arqueológica termine su labor pastoral en dicho municipio. Una de las amenazas es sellar las puertas del templo e impedir la salida y entrada de feligreses.