Dos integrantes del Movimiento por la Alternativa social (MAS) lesionados, robo de documentos que contenían las firmas donde se exigía la renuncia del gobernador del Estado Rafael Moreno Valle, y equipo de sonido fue el saldo que dejo el violento desalojo del campamento instalado en el zócalo la madrugada del Lunes ,perpetrado por unos 20 policías vestidos de civiles .
Arnulfo Hernández y un joven que prefirió no revelar su nombre-ambos integrantes del MAS- narraron que entre la una y dos de la mañana del lunes escucharon ruidos , y sobresaltados salieron del campamento para ver que ocurría ,siendo en esos momentos que se percataron que personal con características policiales ,desmontaban las estructuras del acantonamiento donde se llevaba a cabo un ayuno indefinido hasta la absolución de la activista Enedina Rosas que se encuentra en arraigo domiciliario por oponerse a los proyectos del gobernador.
“Estábamos durmiendo –dice Arnulfo- y despierto a mi compañero que se solidarizó conmigo esa noche para resguardar el campamento, cuando los tubos que sostiene las lonas casi se nos vienen encima, como pudimos salimos y nos encontramos a los sujetos encapuchados que nos empezaron a golpear y robarse las libretas de las firmas: ‘Haber hijos de su puta madre, corran o se los carga la chingada’, nos decían y en seguida se llevaron todo en camionetas estacionadas a unos metros”.
Marco Mazatle Rojas y Ricardo Jiménez Ávila ,dirigentes del Movimiento por la Alternativa Social denunciaron que con este desalojo queda una vez más demostrado que el gobierno de Rafael Moreno Valle, es “ Un represor sistemático” contra los opositores a su “Régimen autoritario”– .Los activistas mantienen ayuno desde hace más de 50 días, por la liberación de unos 44 presos políticos que el gobierno de Rafael Moreno Valle ha condenado a la cárcel, utilizando la fabricación delitos y utilizando como “garrote” al Poder Judicial del estado-.
Los activistas denunciaron que en los días que duró el campamento –plantón, el secretario de gobernación municipal, Guillermo Aréchiga Santamaría, los estuvo amenazando constantemente para que retiraran su protesta del zócalo y recordaron que hace unas semanas su compañera Irene Herrera sufrió la detención arbitraria por uniformados del gobierno de Puebla a quien se le fabricó una supuesta infracción automovilista, como pretexto para privarla de su libertad.
Ante estos hechos Marco Mazatle Rojas y Ricardo Jiménez Ávila informaron que el MAS interpuso una denuncia penal en contra de las autoridades estatales y municipales por el robo de su equipo de sonido, así como de cuatro libretas con firmas donde se denunciaba y pedía la renuncia de Rafael Moreno Valle, catres y sillas.
Después del desalojo violento y lesiones a dos integrantes del MAS, el ayuntamiento colocó una exposición de textos e ilustraciones titulada «Puebla en 100 palabras», que es custodia por una veintena de policías estatales.