A través de la Dirección General de Gobierno del estado de Puebla, la administración de Rafael Moreno Valle Rosas, presiona a los dueños de los terrenos por los que pasará el “Gasoducto Morelos” para que entreguen su propiedad a la iniciativa privada así como la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Selene Santamaría, representante del Comité de San Buenaventura Nealtican, informó que en las últimas semanas han estado llegando citatorios a dueños de predios del gobierno estatal para que entreguen sus terrenos, los cuales actualmente se usan para la siembra.
El acoso del gobierno morenovallista, aseguró, tuvo un incremento en el último mes porque hasta cuatro veces por semana recibían los documentos oficiales.
La afectada, agregó que existen amenazas de encarcelamiento a los ejidatarios que están la negativa de entregar sus predios, por lo tanto, se dirigirán a la Sexta Visitaduría de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para pedir medidas cautelares amen de terminar con las presiones.
En la reunión se prevé representantes de los estados de Tlaxcala y Morelos, que también se encuentran afectados por el proyecto que a su vez impulsa el gobierno de la República que encabeza Enrique Peña Nieto.
En Puebla afectaría un promedio de 10 municipios. Los más afectados son Nealtican, Tecuanipan y Cholula. La obra abarca en 160 kilómetros los estados de Puebla, Morelos y Tlaxcala.
Los trabajos se encuentran concesionados por el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas a las empresas españolas: Elecnor, Abengoa y Enegas así como a la italiana Bonatti.
Selene Santamaría aseguró que la obra tiene diversas irregularidades por la falta de estudios de impacto ambiental, uso del suelo, daño en el aire que realiza la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Asimismo, existe la ausencia de transparencia en el trazo de los ductos y falta la consulta popular, violando el decreto indígena del IOT número 169 en “que los pueblos en países independientes conservan todas sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas”.
La activista anticipó que en el estado vecino de Tlaxcala podría iniciar la construcción de ductos y alertó el riego del estado de Puebla porque dónde pasan el gas está a pocos kilómetros del volcán más activo del país, el Popocatépetl.
“Ya hay una amenaza porque esta semana o la otra, llegará maquina al estado de Tlaxcala, queremos que estén atentas, con nuestra causa, porque van a querer imponer como en Puebla su obra, violando los derechos humanos”.