Causa y Efecto Por José Antonio de la Vega Moreno: Los planes del gobernador luego de su derrota.

Los planes del gobernador luego de su derrota.

Para Rafael Moreno Valle Rosas, gobernador del Estado de Puebla, las condiciones de su estrategia política ha cambiado.

El objetivo no logrado el pasado 7 de junio de alcanzar triunfos en la mayoría de distritos electorales de los 16 en disputa, lo hacen repensar y replantear bien las cosas antes de que se presenten nuevos descalabros futuros.

La derrota  en los comicios federales pasados transformó la estrategia política electoral, no de los panistas, sino del egocentrismo de Moreno Valle y su pequeña e ineficiente estructura rumbo a los próximos dos procesos electorales 2016 y 2018 donde están en juego la mini gubernatura y la Presidencia de la República.

Echó para tras la posibilidad de poder modificar el tiempo de duración de la mini gubernatura, uno de sus esbirros, Eukid Castañón –por cierto diputado federal plurinominal- negó que fuera ampliarse la gubernatura a 4 años 8 meses, luego de que los propios panistas habrían canalizado o resbalado al interior del poder legislativo y diversos medios de comunicación tal posibilidad.

La derrota morenovallista, los hizo recular. El panorama político no les favoreció por eso echaron dicha posibilidad para atrás.

Los gallos de Rafael Moreno Valle Rosas perdieron. Los planes del ejecutivo “A” y “B” son Antonio Gali Fayad y su señora esposa, Erika Alonso, siempre lo han sido, pero sus condiciones ahora son distintas, El presidente municipal entregó malas cuentas en tres de los cuatro distritos electorales, lo que lo hace vulnerable y sin poder acceder a la candidatura a la minigubernatura, por lo que se afianza en esa posición  la presidenta del DIF estatal.

-Difiero de lo que el periodista Ricardo Morales planteó ayer en su columna, en donde asegura que Fernando Manzanilla, ex Secretario General de Gobierno, es el plan “B” de Rafael Moreno Valle Rosas después de lo sucedido el pasado 7 de junio.

A quienes no lo quieran creer la ruptura entre Rafael y Fernando, es genuina, no es ninguna simulación.

Desde el reclutamiento que efectuara Moreno Valle de Manzanilla la liga se tenzó. Se habla que uno quería ejecutar un plan social efectivo que ayudara al desarrollo y ordenado de Puebla, mientras que el otro, quería todo el poder para él, claro, la ambición del gobernador, hizo que se rompieran en definitiva los lazos en lo que ha política se refiere, ya que en materia familiar no se pueda diluir.

Apuesto además, que Moreno Valle no piensa en estos momentos en Fernando Manzanilla, quien se ha dedicado en los últimos años a sus empresas, a sus negocios.

La ruptura es total, la separación entre estos dos hombres en materia política es definitiva.

Son coyunturalmente disímbolos, uno ambicioso y fascista, el otro, buen operador y con sed de justicia social.

Quien no quiera aceptar ni ver la ruptura definitiva entre Rafael Moreno Valle y Fernando Manzanilla, lo verá con el tiempo.

Mientras tanto, Moreno Valle se lame sus heridas y trata de armar su tablero de ajedrez que fue movido intempestivamente el pasado 7 de junio. No sabe dónde quedaron sus peones y por qué fallaron sus alfiles.

Eso pone en jaque al flamante gobernador poblano.

O no?