La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no es la instancia correspondiente para permitir bodas entre personas del mismo sexo, sentenció el vocero de la Arquidiócesis de Puebla, Felipe Pozos, para reiterar su rechazo a la determinación de la autoridad federal.
El prelado señaló –una vez más- su rechazo a la unión a personas homosexuales, y arguyó que se debe seguir defendiendo las familias con modelos tradicionalista: padre, madre e hijos.
“La sentencia de la Suprema Corte, además de romper con esta sólida tradición jurídica y el bien social que custodia, contraviene los principios del federalismo y la razón de ser de los diversos códigos civiles, que pretenden responder a la realidad concreta de cada entidad federativa y su pluralidad, lo que debe reflejarse en las acciones de los jueces”.
La postura de la iglesia católica, manifestó, sostiene que el matrimonio sólo puede celebrarse entre una mujer y un hombre por el “bien” de toda la sociedad.
Aunque el máximo representante de la fe, el Papa Francisco ha manifestado su respaldo a los matrimonios igualitarios, en Puebla el vocero de la grey consideró que sólo son “normales” los enlaces conyugales entre personas del sexo opuesto.
La entidad, se suma a la campaña nacional de la Conferencia del Episcopado Mexicano contra la reciente resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), al referir que “crear nuevas formas de matrimonio, porque ya no sería matrimonio, sino otro tipo de unión”.
Pozos rechazó que negar a las parejas gais casarse sea un acto “discriminatorio”, ya que dijo que sólo se respeta la ley.
“Reiteramos nuestra convicción basada en razones científicas, sociales y religiosas, que la familia, célula de la sociedad, se funda en el matrimonio de un hombre y una mujer. Por su capacidad procreativa, garantizan la supervivencia”.