El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, denunció las pésimas condiciones en las que tiene el gobierno del estado, los Centros de Readaptación Social (Ceresos), ya que presentan un número elevado de personas en espacios reducidos.
El hacinamiento en cárceles Puebla, dijo que es preocupante en los municipios de Zacatlán, Izúcar de Matamoros y Atlixco, donde es común que las celdas den albergue a dos centenares de presos, incluso, por falta de lugares, obligan a las mujeres a pasar su penitencia junto a los varones.
Según el estudio de la asociación México Evalúa, “La cárcel en México: ¿Para qué?”, Puebla tiene 5 de las 13 prisiones más saturadas de reos en todo el país: Tepeaca en primer lugar nacional, con una sobreocupación del 578.26 por ciento; Izúcar de Matamoros, con un 348.8 por ciento y San Pedro Cholula, con un 329.25 por ciento.
El representante de la grey católica, señaló que durante sus visitas a los penales por sus giras pastorales, ha detectado: sufrimientos, carencias y muchas necesidades de quienes están detenidos.
Denunció que en Zacatlán no se encuentran divido los espacios para hombres y mujeres: “Veo mucha gente en espacios muy pequeños. Aquí en Puebla hay un Cereso para mujeres pero en otros, hay una población de 18 o 20 mujeres entre una población de 200 internos. Estos espacios ojalá se dignificarán”.
“Zacatlán, Atlixco e Izúcar, son espacios muy chiquitos para 200 personas o más. Son unos cuartitos nada más. Hay muchas carencias y, por eso, hacemos nosotros, lo que humanamente podemos”, denunció.
Sánchez manifestó que pagar una pena en prisión es “sufrimiento para los internos y las familias”, ya que dijo que el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas obliga a los reos a pagar sus servicios además de que los parientes deben de llevar alimentos.
“Hay muchas necesidades, muchas carencias y ya el estar ahí es un sufrimiento. A ese sufrimiento se añaden otros sufrimientos. Por eso, nosotros estamos lo más que podemos cercanos a ellos”, agregó.