“Nuestro niño no murió, lo mataron”

El gobierno morenovallista truncó un 9 de julio, los sueños del adolescente de 13 años, José Luis Tehuatlie Tamayo. La aplicación de la #LeyBala en una protesta en la comunidad de San Bernandino Chalchihuapan terminó con la ilusión del infante, no pudo estudiar para ser médico, se terminó la ilusión de lograr ser ganadero, como su abuelo.

A un año del asesinato del menor a manos de policías estatales, la madre, Elia Tamayo señaló que el gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas y el responsable de la seguridad en la entidad, Facundo Rosas siguen burlándose de ella.

“¡Ya basta, somos pobres, pero todos valemos lo mismo!”, consignó para pedir la libertad de los pobladores de la región que aún se encuentran presos por este caso.

-Le doy gracias a Dios, que por un tiempo me mandó un niño, trabajador, estudiante, humilde, decente y amable.

-Yo le doy gracias que me lo haya recibido, vamos a seguir pidiendo justicia.

-Mi hijo me ha dado las fortalezas. No ando sola, tengo un gran acompañante.

-Rafael Moreno Valle Rosas y Facundo Rosas quitaron la vida a un niño que tenía sueños, ilusiones, una vida por delante que no tenía que pagar esto. Aquí le pido que suelte a todos los hermanos inocentes. Los que deberían estar encerrados son ellos.

-Ellos deberían estar encerrados, pero siguen libres, burlándose de nosotros. ¡Ya basta, somos pobres, pero todos valemos lo mismo!

-Gracias a los pobladores de Chalchihuapan por estar en estos momentos con nosotros, en los momentos más difíciles.

-Aquí estamos en pie de lucha, el 9 de julio de 2014 le arrebataron la vida a mi niño José Luis Alberto, hoy cumpliendo un año, en 9 de julio 2015 no hay nada de justicia.

-He sentido sufrimiento, pero aquí estoy con las fuerzas necesarias, para seguir pidiendo justicia para que ningún niño o niña pase por lo mismo.

“Nuestro niño no murió, lo mataron”

La familia de Elia Tamayo manifestó que el gobierno del estado ha sido omiso a cumplir con sancionar a los responsables y omitir sus responsabilidades por omitir las recomendaciones por violar los derechos humanos del máximo órgano del país.

“Pedimos es justicia, ya ha pasado un año y no se ha hecho nada. Nuestro niño no murió, lo mataron. Y ese niño no descansa porque no se hace justicia. ¿Por qué nos han hecho tanto daño?”.

Su hermana, condenó que personas inocentes se encuentran en la cárcel, sin embargo, los policías que dispararon el proyectil se encuentran en la calle, libres: “Creo que no es justo, nosotros pedimos justicia, no le tenemos miedo. Únicamente le tengo miedo al Padre que nos dio la vida. El gobernador se hace tonto. Dios sabe muy bien lo que hizo y no lo va a castigar”.